Legión proletaria, legión campesina,
en filas compactas marchemos al frente.
Al hombro el fusil, y con ojo avizor.
Disponte a batir con enérgico ardor
al capitalismo, que es nuestro opresor.
Del paria que sufre prisión o destierro
está con nosotros su gesto rebelde.
Sin miedo al terror del fascismo cruel,
lucharemos unidos en haz contra él
y al mundo del fraude podremos vencer.
En filas de acero, llevemos delante
la roja bandera del Soviet triunfante.
Nuestro frente rojo siempre ha de volver,
del duro camino que ha de recorrer,
siguiendo la linea de la Cominter.
La luz leninista alumbra el camino.
De frente, al asalto del capitalismo.
Dos clases están a la lucha final.
La consigna nuestra: el Soviet mundial.
¡En pie, proletarios, con temple a luchar!