Al sur de todo el cielo está mi tierra
morocha el alma, mate y bandoneón.
De bombo el corazón le late en versos
y anida en las guitarras su canción.
Al sur de todo el cielo está Argentina
las voces de Atahualpa y de Gardel.
Los sueños de inmigrantes que llegaron
de Europa sin más tierra que su fe.
Yo soy de aquí, del sur de todo el cielo,
milagro del coraje de alumbrar.
Canciones del hembraje que trabaja
creyendo en una historia por a cambiar.
Y porque voy así soltando versos
la tierra va diciéndome al andar
que soy del sur de todo el cielo
que va haciéndome cantar.
Al sur de todo el cielo está señores
mi gente cobijando una ilusión
las noches con un tango a contramano
la zamba redimiendo una traición.
Y al sur de todo el cielo yo le canto
al hombre laburante y su pesar
volviéndome más sur en el deshielo
de suertes que le esconden su bondad.