De toda la flota el
era el mas jalador.
No habia rival
para este ganan.
Pata de perro por aquí,
Pata de perro por allá.
Mario era el nombre
de este buen carnal,
Por todos lados va,
ya no regresara.
El tiempo se aprovecho
y todo lo transformo.
Viejo el barrio,
viejo hasta el danzón.
Un amigo se caso,
a otro panza le salió.
Nueva flota apareció
y en la esquina
ya nada es igual,
era mejor viajar.
Un buen día llego el rumor
que un amigo de un señor
en un barco se lo topo.
Que habia estado en Nueva York,
y bailado en Japón,
que en Brasil se enamoro,
y en Haití toco el tambor,
a Mandela conoció,
y en URSS se emborracho.
Nadie supo si es verdad.
Sus amigos suelen recordar
que el era un buen carnal
que decidió viajar.