En los estancos no venden tabaco
me da igual que no vengas a dormir
En las farmacias no hay polvos de talco
no me apetece ver tus ojos sonreir...
Voy a trazar un plan
espectacular
organizaré una fiesta
que nadie olvidará.
Esta tarde no pienso llamarte
ni siquiera voy a pensar en ti,
me sentaré en este sofá gigante,
dedicaré mis horas a reir, a reir, a reir.
Intuyo que aquí sentada,
en este bonito sofá,
algo muy grande puede
que empiece a comenzar.
No me apetece escuchar tus bromas
tus chistes malos me hacen llorar,
tranquila no espero a que me digas nada.
Ya me dirás a quién voy a engañar...
Ya no te podré borrar
de mi agenda sideral
ya no te podré borrar
ya no te podré borrar