Echo de menos
la cama revuelta
ese zumo de naranja
y las revistas abiertas.
En el espejo
ya no encuentro tu mirada,
no hay besos en la ducha
ni pelos, ni nada
Y entre nosotros
un muro de metacrilato
no nos deja olernos
ni manosearnos
y por las noches
todo es cambio de posturas
y encuentro telarañas
por las costuras.
Lo mismo te echo de menos, lo mismo,
que antes te echaba de más
Si tú no te das cuenta de lo que vale
el mundo es una tontería
si vas dejando que se escape
lo que más querías.
Echo de menos
el crujir de tus tostadas
sentir por el pasillo
tu gato que araña.
En mi camisa
llevo tu aroma preso
y el rojo de tus labios por el cuello
Entre nosotros
un muro de metacrilato
no nos deja olernos
ni babosearnos
y por las noches
todo es cambio de postura
y encuentro telarañas
por las costuras.
Lo mismo te echo de menos, lo mismo,
que antes te echaba de más
Si tú no te das cuenta de lo que vale
el mundo es una tontería
si vas dejando que se escape
lo que más querías.